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Garnatat Al Yahud «La Granada de los judíos»

Un antiguo proverbio sefardí afirmaba que “quien no tiene una casa es vecino de todo el mundo”.

En granada existen muchos rincones con encanto, que te acogen abriendo amablemente las puertas de su casa, su historia y su cultura.

Con ese exterior que te llena de curiosidad por ver lo que alberga dentro y rebosando mestizaje que una vez más te emocionará.

Se trata de una iniciativa que se arma de ganas y valentía en esta, la ciudad de las «tres culturas» buscando abrir las puertas a la «judería» granaína, en el corazón del emblemático «Realejo»

Hoy toca descubrir que Granada fue antes que musulmana y cristiana, judía.

613 granos. Este es el número de preceptos que un buen judío debe cumplir para ser una persona ética y justa.

Con gran delicadeza y respeto la intérprete de este centro cultural sefardí me cuenta que la historia comienza mucho antes del dominio musulmán y la conversión cristiana.

Las palabras alemanas Judensau (cuya traducción es ‘cerda judía’) y Judenschwein (‘cerdo judío’) describen una iconografía antisemita de origen medieval. La comparación con un cerdo se emplea para aumentar la humillación contra los judíos, debido a que esta carne es considerada impura (en hebreo tame) además de ser un tabú alimenticio.

Sefarad (Sefarad (en hebreo, סְפָרַד) es un topónimo bíblico aplicado a la península ibérica por la tradición judía, mientras queda reservado su uso en la lengua hebrea moderna para la actual España suena a aquellas gentes desterradas de la patria en la que sus antepasados vivieron durante siglos.

La desconocida Garnatat Al Yahud cuya traducción significa «la granada de los judíos» me lleva a un recorrido por la cultura judía en un pequeño y acogedor espacio que me va desgranando una agridulce historia.

El pueblo judío también le concede a la granada el simbolismo de la abundancia, razón por la cual deben tomarse granadas durante la celebración del año nuevo judío a principios de otoño, momento en que dicha fruta, al madurar ofrece un dulce sabor.

Descubro también una de sus celebraciones más importantes, tiene mayor relevancia por su asiduidad, todos los sábados, os hablo del gran día del descanso, el «Shabat»

La Menorá, uno de los principales símbolos del judaismo. Una lámpara de aceite de 7 brazos. En la antigüedad se iluminaba en el Templo de Jerusalén y era un objeto extremadamente sagrado e imponente. 

Esta lámpara se prende cada sábado para la festividad del «Shabat», probablemente la Menorá sea un símbolo esencialmente evocativo de la Creación que, como es sabido, tuvo lugar durante seis días,​ a los que debe agregársele el día en que el Dios descansó (el sábado).

También se encuentra en cada iglesia, en el altar, donde se enciende para expresar Fe y Esperanza a través de su luz. La luz siempre ha sido un símbolo muy importante para los cristianos, asociado con la Resurrección de Cristo, y tiene un significado muy profundo y solemne.

Para los judíos, la luz era importante, y lo demuestra la importancia atribuida por este pueblo a la Menorá.

La palabra Menorá deriva de la misma raíz de or, es decir luz, e indica el candelabro de siete brazos, símbolo de la religión judía.

​ Así como la caña vertical de la Menorá posee una condición excepcional, del mismo modo el shabat, séptimo día de la semana hebrea y a su vez el día sagrado de la semana judía, es para el pueblo de Israel de cardinal importancia:

«Guardarás el día de reposo para santificarlo, como el Señor Yahveh, tu Dios, lo ha mandado. Seis días trabajarás y harás todo tu trabajo«

Durante mi visita la gastronomía tampoco puede faltar, al igual que los musulmanes tienen su comida «halal «los judíos son otra cultura que presta mucha importancia a la «purificación «de los alimentos que ingieren.


La palabra kosher significa apto o adecuado, se incorporó de manera informal al idioma inglés con ese significado. Pero las leyes kosher tienen su origen en la Biblia, y están detalladas en el Talmud y en otros códigos de la tradición judía. Esta etiqueta la reciben ciertos productos que respetan los perceptos de la religión judía, considerados puros y aptos para su consumo por los practicantes de la religión.

Es una forma de conectarse con Dios a través de la santificación de la comida, dedicarle a Él, el gozo de comer. 

https://es.chabad.org/library/article_cdo/aid/532279/jewish/Por-qu-comemos-Kosher.htm

Prosigo mi viaje sefardí ahora con algunos personajes relevantes judíos.

No puede dejar de salir a colación el «edicto de expulsión de 1942»

El edicto fue publicado la semana del 29 de abril de 1492. Declaraba que ningún judío tenía permiso de permanecer en el reino de España y que todos los judíos que quisieran convertirse serían bienvenidos a quedarse. El poder económico de los judíos españoles no fue de ninguna ayuda para cambiar esta decisión.

El viaje ahora nos lleva a la bonita simbología sefardí

La estrella de David es un emblema compuesto por dos triángulos equiláteros superpuestos formando una estrella de 6 puntas o hexagrama. A pesar de estar popularmente asociado al judaísmo, este símbolo también es usado en otras religiones como en el cristianismo, el islam y en el hinduismo. Tuvo en origen un sentido mágico: se colgaba en las paredes para ahuyentar a los malos espíritus. Un símbolo de paz y de equilibrio, para el judaismo no se puede mezclar por ejemplo la vida y la muerte siendo dos cosas totalmente opuestas, como lo son el cielo y la tierra.
El Tallit katán o («talit pequeño») es una vestimenta interior con flecos que visten los varones entre los judíos religiosos. Es una prenda similar a un poncho con un agujero para la cabeza y con flecos especiales torcidos y anudados conocidos como tzitziot (plural Tzitzit) unidos a sus cuatro esquinas.

(También talet o taled), manto de oración que usan los judíos en las ceremonias religiosas. En la época talmúdica, el término talit (proveniente posiblemente del griego stole) significaba cualquier sábana o manto, incluyendo el que se usaba para las oraciones, porque tenía flecos en las extremidades o pezuelos, en cumplimiento de la ley bíblica, y son destinados a recordar a los israelitas los mandamientos divinos.

La kipá es un sombrero circular, sin ala, que cubre solamente la coronilla, y es usado por los hombres judíos en ritos o festividades.
“En la historia judía no hay coincidencias”
lo que si ha sido una coincidencia es descubrir este lugar en compañía de una maravillosa intérprete y para dar gran ejemplo de mestizaje dos chicas viajeras catalanas en busca de desgranar la Garnatat Al Yahud . Así que aquí acabo esta breve toma de contacto con la cultura sefardí, pues como bien dice el proverbio
«Tanto un invitado como un pescado empiezan a oler mal al cabo de tres días«